EL PRACTICANTE: NO ES SOLO AMOR

EL PRACTICANTE

Dirección: Carles Torras

Año 2020

Sinopsis

Ángel, trabaja como técnico en emergencias sanitarias a bordo de una ambulancia. Tras sufrir un grave accidente, su vida junto a Vane, empieza a desmoronarse. Obsesionado con la idea de mantenerla junto a él, convertirá su vida en un infierno del que será difícil escapar.

Conclusiones

Cuando te enfrentas a un título tan poco, o poquísimo atractivo, sorprende un nombre tan frio inexpresivo y vacío. Pero comienza la función, con el día a día de un Casas inmenso con un papel que produce rechazo desde el momento cero, la manera de la que construye su personaje fotograma a fotograma ya es una declaración de la degeneración humana y del personaje que llena la historia, si MARIO CASAS fue en un breve lapso de tiempo encasillado y mal encasillado, como que solo podía ¨quitarse la camiseta¨ más tarde demostró en distinto papeles su verdadera valía cuando el personaje lo exige y se le da cancha, pero en este caso es otra cosa, es un auténtico monstruo de la interpretación, llena al personaje no solo en su primera fase de presentación, si no en su giro al infierno más siniestro y duro dándolo todo y no solo en sus gestos, miradas y acciones, que asustan y mucho, sino también en la vida de ese personaje destruido y postrado a una silla donde se desenvuelve con una perfección, que puedo asegurar que te la vas a creer y también me atrevo a asegurar que esa perfección le habrá costado horas de visitas a centros especializados y contactos en ellos, su compañera de reparto no es menos destacable en un también perfecto papel de cordero al servicio del mal, nunca he visto miradas que valgan y digan tantas cosas como las de esta pareja.

Lo que nos Enseña

Una historia fría y distante al tiempo que realista, por un lado Carles te sabe enseñar a entender una soledad y aislamiento de un ser maligno y como ese aislamiento saca algo del que aunque se ve venir envuelve la historia y sorprende en momentos, una cinta de terror, pero nada de un terror sobrenatural del que es fácil olvidarse al apagar el televisor, un terror humano, terrenal, natural, y siniestro pero sinceramente, jodidamente real, ¿hasta dónde puede llegar el ser humano por lo que él llama amor?, esa y muchas otras preguntas se abren este guion perfectamente estructurado, así como lleno de matices que son críticas a una muda sociedad donde nada que no te ocurra a ti importa. La cinta está acompañada de una fotografía que combina a la perfección un ambiente ajado y añejo con una fría y luminosa sociedad que sé casi abre al salir de casa un enorme acierto que suma y sigue con la maestría de Carles, no dejo de preguntarme ¿cómo un título tan soso puede darme tanto?. Como punto final decir que cuando avanza la historia entiendes que el título que tanto he juzgado antes de darle al Play cobra todo el sentido.