SOBRENATURAL: EL SABE QUE ESTAS SOLA
SOBRENATURAL
Director: Eugenio Martin
Año: 1981
Sinopsis
El indeseable marido de Julia, después de fallecer, regresa en forma de espíritu para seguir acosándola y maltratándola. Ella pedirá ayuda a varios amigos y expertos, pero todos los esfuerzos para derrotar al diabólico ser, parecen inútiles....
Conclusiones
Una extraña cinta de nuestra Fantaterror, por un lado el halo misterioso que rodea a la cinta, este data a la producción e muchos sitios como filmada y estrenada en 1983, dando esta fecha como cierta y tachando a la cinta de Martin de una burda copia para aprovechar en éxito de algunas cintas americanas del momento (Poltergesit la más notable), pero esto es solo una leyenda, una confusión o algo quizás más sobrenatural, pues el año de producción y estreno es 1981, con lo que por lo menos la cinta y su temática es original, (aunque pos supuesto esto no significa que la copia fuese tampoco en orden inverso), así pues desde el desconocimiento de por qué se produjo ese error de fechas en algún lugar, la materia en si es lo que esta cinta nos aporta, la cinta desde su primer fotograma da un aspecto de bajo presupuesto, lo que es extraño dado que las anteriores cintas que rodo Eugenio de género, fueron todas muy solventes en cuanto a presupuesto, (o por lo menos así lo apretaban) y fueron películas con una taquilla bastante aceptable para que la productora apostara de nuevo por él. Quizás este presupuesto más ajustado se debiese a que ya en los 80,s el Fantaterror había pasado a mejor vida, ahogado por las nuevas leyes de subvenciones habían dejado de lado el género más longevo de las dos anteriores décadas.
Lo que nos Enseña
Aun con este apretado presupuesto Eugenio muestra una vez más su talento tras las cámaras, haciendo que este juegue a su favor dotando a la película de una fotografía pobre y oscura, que no hace sino engrandecer los momentos de tensión, dándoles una apariencia más propia de un documental sobre fantasmas, de aquellos tan famosos en las tardes de domingo de nuestra joven televisan de la época, los momentos, digamos sobrenaturales, están filmados con una oscuridad, que por un lado hacen invisibles los toscos mecanismos de los que se debieron servir los efectos, pero por otro lado juegan a favor de el estremecimiento del espectador, al desaparecer la visión cinematográfica en virtud de la mencionada virulencia del documental más de guerrilla, por otro lado es extraño coma a la vez una B.S.O. tan vacía de sentimientos y de vida, perfectamente pudiendo ser esta, proveniente de una biblioteca de sonidos, pero una vez más Martin da lo mejor y esa carencia de un score más digno de una buen producción, de nuevo al contrario de lo esperado suma a la cinta dotando a sus escenas de mucha más tensión, pudiendo esta crear más desasosiego al espectador. En resumen una de esas raras avis del Fantaterror, donde sin duda se puede asegurar que menos es más, con el adecuado director, y ese sin duda es nuestro apreciado Eugeni Martin, un director todo terreno, tanto en géneros como en presupuestos.