Y LA MUERTE LO SEGUÍA: ERA SE UNA VEZ AL OESTE DE NINGUNA PARTE
Y LA MUERTE LO SEGUÍA Director: Ángel Gómez Hernández Año: 2011 Sinopsis El joven Johnny es testigo de excepción del insólito relato narrado por un viejo indio a la luz de una fogata. Seguiremos así las desventuras de Fred Carlson en busca del Holandés un famoso y temido forajido que asesino a su esposa. La persecución que durará dos años y que concluirá en un misterioso poblado de Arkham, donde se habrá de consumar la venganza. Conclusiones La unión de un Western con cine de terror, una fusión tan atractiva como peligrosa, hacer esta fusión puede resultar a priori fácil, hacerla bien desde luego ya es otra cosa, en este caso estamos sin duda ante uno de esos contados aciertos, parte de este acierto radica en que esto no es una cinta inspirada en los western sin más se puede decir que lo que es sin duda un Spaghetti Western en toda regla, pues de este sub genero toma todo lo que lo convierto en leyenda, tanto los ambientes y personajes sucios como la mala leche que caracterizaba a sus historias, eso aderezado con su dosis de terror y una excelente dirección y porque no decirlo con una historia redonda (obra del padre de Ángel y gran escritor) dota la historia de una personalidad y desarrollo EXCEPCIONAL en toda su medida, cuando te sientas ante la pantalla y el desierto te inunda, no pareces estar ante un corto, pues su lenguaje cinematográfico esta mucho más a la altura de un largometraje, toda la historia esta tan perfectamente dibujada sobre el negativo que hace difícil pensar en algo corto, pues la condensación de información es tan precisa y talentosa que una vez finalizado su visionado no das crédito al poco tiempo empleado en desplegar el acto. Lo que nos Enseña Como rodar un corto que no lo parece, al margen de la evolución que su director fue mostrando de un trabajo a otro aquí ya toca el techo dando a entender de lo que es capaz y dejando muy, muy claro que está preparado para dar el salto al formato largo, el talento que emana de esta cinta se dejaba ver tímidamente en sus anteriores trabajos, pero aquí es donde se despliega del todo, quizás por la unión de géneros que le hace sentir muy cómodo (la manera de la que trabaja en planos, encuadres, luces, sombras son muestra de ello) o solo porque ya ha alcanzado la total madurez tras las cámaras casualmente al llegar a este trabajo, sea como fuere estamos ante una obra muy talentosa que muy pocos directores con mucha más experiencia hubiesen sabido enhebrar tan bien como nos lo brinda Ángel, un hombre de cine para cine del que a buen seguro no tardaremos mucho en ver algo en pantalla grande.